CABARET
EXPRESIONISTA
El
grito expresionista puede ser interpretado como un intento por
restituir la relación orgánica entre trabajo, como creación
artística, y vida, como creación libre, lejos del principio de
calculabilidad.
Brecht
y el expresionismo: reconstrucción de un diálogo revolucionario Por
José A. Sánchez
El
cabaret, entendido como nuevo lugar de encuentro para desacralización
del arte al sacarla de los espacios oficiales, nace como novedad a
principios del siglo XX y aún pervive en la memoria que suponen los
espacios culturales independientes. El cabaret, además de un
espactáculo de varietes, es el punto de encuentro en donde nace el
moviemiento expresionista alemán, el cual ejerce una influencia
fundamental en Bertolt Brecht, el gran renovador del teatro social.
Los cabarets expresionistas, como el Cabaret Neopatético de Kurt
Hiller, organizaban veladas en donde pintores, gente de teatro,
escritores y estudiantes asistían a lecturas de textos que también
aparecían en revistas especializadas. Dentro del espacio cultural
que suponía el Cabaret se dieron distintos movimientos
expresionistas; Los Gritadores, Los visionarios o los Primitivistas.
Estos últimos rechazaron el ayer para refugiarse en el anteayer, en
una clara referencia a la convivencia entre lo moderno y lo tribal.
Mi trabajo artístico tiene una fuerte influencia de aquello que se
llamó el cabaret expresionista, en donde la máscara o el retrato
juegan un papel fundamental para esta primera serie de cuadros.
Roberto
G Currás